La costa centro oriental de Australia atrae a surfistas de todo el mundo, pero es probable que el cambio climático disminuya este entusiasmo por las olas australianas. Ciertas investigaciones predicen que para el 2100 el aumento en las temperaturas reducirá el numero de las tormentas regionales que provocan olas grandes.
“Las tormentas que ocurran podrían tornarse mas intensas - dice Andrew Dowdy, del Centro de Investigación Meteorológica y del Clima de Australia -, pero habrá menos días con olas grandes”,
Hasta el 28% menos para que los surfistas viajen sobre las olas, que llegan a medir seis metros o mas. Mala onda, hermano.
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